Científicos alemanes avanzan en fórmula para terminar con los residuos de plástico de poliuretano
En las últimas décadas la invasión de plásticos en el planeta ha generado que muchos estudios intenten encontrar la manera de utilizar microorganismos, como bacterias y hongos, para degradar los plásticos de poliuretano, la razón: su reciclaje es muy complicado y costoso, ya que el material no se derrite al ser calentado.
Acabar con los residuos de plásticos de poliuretano puede estar más cerca, después de que un grupo de científicos alemanes del Centro Helmholtz para la Investigación Ambiental en Leipzig (al este de Alemania) hayan identificado una bacteria que puede degradar algunos de los químicos que componen ese material.
El estudio, publicado este viernes 27 en la revista científica “Frontiers in Microbiology”, identifica una cepa de bacterias, llamada Pseudomonas sp. TDA1, que es capaz de degradar algunos de los compuestos tóxicos del plástico con base de poliuretano.
Uno de los autores de la investigación, el doctor Hermann J. Heipieper, explicó que la bacteria “puede usar estos compuestos como fuente única de carbono, nitrógeno y energía”, siendo capaz de sobrevivir únicamente con ellos.
Sólo en 2015, los productos de poliuretano representaban 3,5 millones de toneladas de todo el plástico producido solo en Europa, pero su reciclaje es muy complicado y costoso, ya que el material no se derrite al ser calentado.
Al no poder utilizarse este método -el más común para los procesos de reciclaje- el 20% de los residuos de poliuretano acaba abandonado en vertederos, contaminando aún más al desprender químicos perjudiciales para la salud y el medioambiente.
“Este descubrimiento es un importante paso hacia ser capaces de reutilizar los productos de poliuretano difíciles de reciclar”, afirmó Heipieper.
Sobre los próximos pasos para el desarrollo de la bacteria, el doctor explicó que deberán identificar el código genético de la enzima que disuelve estos compuestos tóxicos. Ahora mismo, sin embargo, no tiene planes inmediatos para crear estas enzimas de forma sintética utilizando ingeniería biológica.
Este futuro paso implicaría la industrialización de esta enzima para disolver los compuestos tóxicos a gran escala, haciendo posible convertir los plásticos difíciles de reciclar como el poliuretano en plásticos biodegradables y neutros con el medioambiente.
De momento, estudios como este son los que establecen “el conocimiento fundamental” que utilizarán los científicos en próximos proyectos, comenta Heipieper.
Imagen de Hans Braxmeier en Pixabay
La carrera por reducir y reciclar los plásticos
Esta bacteria podría ser una de las herramientas más eficaces en la lucha por la eliminación de los residuos de poliuretano, un área en el que trabajan muchos investigadores actualmente.
Muchos estudios tratan de encontrar la manera de utilizar microorganismos, como pueden ser bacterias y hongos, para degradar estos plásticos, un campo en el que esta nueva investigación ha destacado por sus conclusiones muy concretas.
La investigación se enmarca en el proyecto “De residuos de plástico al valor del plástico usando Pseudomonas y biología sintética” (P4SB), un programa científico de la Unión Europea con el objetivo de investigar microorganismos que puedan degradar ese tipo de plásticos para convertirlos en biodegradables.
La Unión Europea también cofinancia otros proyectos relacionados con la mejor gestión de los residuos de poliuretano, como “LIFE-Repolyuse“, centrado en este caso en la reducción y reutilización del material con el fin de prolongar su vida útil.