Parque Nacional Volcán Isluga cumple 57 años protegiendo el ecosistema altoandino

Patrimonio cultural aymara, la protección de flora y fauna nativa, además de paisajes representativos del altiplano, alberga el área silvestre protegida más antigua de la región.

El mirador de Suricayo, la laguna de Arabilla, el avistamiento de avifauna, conocer las iglesias altiplánicas y aprender de las tradiciones ancestrales del pueblo aymara, destacan entre los imperdibles del Parque Nacional Volcán Isluga, que cumplió 57 años desde su integración al Sistema Nacional de Áreas Silvestres Protegidas del Estado administrado por CONAF.

Con una extensión que abarca más de 174 mil hectáreas, el parque posee una variada gama de especies silvestres de fauna, tales como flamencos, vicuñas, suris, gato andino y taruca; donde varias de ellas son de alto interés ecológico por la condición de vulnerabilidad en que se encuentran.

En este entorno además se encuentran especies como la llareta que convive con tolares y hierbas como la paja brava. También destaca la queñoa, el árbol que forma parte de los bosques de mayor altitud y más septentrionales del país, además de ser uno de los ecosistemas más amenazados del mundo clasificados de alta prioridad de conservación. Cabe destacar que esta especie se relaciona con las creencias y tradiciones para el pueblo aymara ya que tiene diversos usos ancestrales.

Natalia Ortega, directora regional de CONAF, indicó que “a pesar de las extremas condiciones climáticas del altiplano, en esta área silvestre protegida existe una gran riqueza florística que es determinada por el relieve y la presencia de cursos de agua, como los bofedales y lagunas altiplánicas. Por estas razones, nuestro equipo realiza diversas acciones, como monitoreos y censos, junto con centrar su trabajo en la preservación de esta riqueza natural”.

Además de esta biodiversidad, en el parque es posible apreciar importantes muestras del patrimonio arquitectónico andino, como la iglesia de Isluga declarada Monumento Histórico y cuyo poblado es Zona Típica.

Finalmente, la directora regional hizo un llamado a la comunidad regional y a los turistas a visitar este parque en el cual podrán realizar diversas actividades recreativas y deportivas, entre ellas, trekking al cráter del volcán, caminatas por los senderos, ciclismo de montaña y disfrutar de aguas termales.

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