Panama líder en carbono negativo: absorbe más GEI que los producidos por efecto humano
Panamá, se encuentra entre los tres únicos países del mundo que califica en la categoría de carbono negativo o “país sumidero”, por su capacidad de absorber más gases de efecto invernadero que los que se producen por la actividad humana. La categoría la comparte con Bután en Asia y Surinam en América del Sur.
A pesar del desafío de la pandemia, en marzo de 2021 y cumpliendo con los compromisos adquiridos ante la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), Panamá publicó su Segundo Informe Bienal de Actualización (2IBA). Con estos informes las naciones reportan, de forma transparente y completa, las actualizaciones de las circunstancias y los inventarios nacionales de gases de efecto invernadero, así como los avances en las medidas de mitigación llevadas a cabo.
Inventario Nacional de Gases de Efecto Invernadero (INGEI)
Panamá preparó su Inventario Nacional de gases de efecto invernadero, que se trata de un conjunto de datos utilizados para determinar la cantidad de gases contaminantes que son tanto enviados como removidos por parte del país en un período de tiempo determinado.
Esta fue la primera vez que Panamá presentaba su inventario nacional de gases de efecto invernadero (INGEI), información que va desde 1994 hasta 2017.
El Ministerio de ambiente panameño (MiAmbiente), junto con otros ministerios y autoridades nacionales, ha sido el encargado de desarrollar los INGEI que constituyen el principal instrumento de planificación para mitigar la crisis climática de manera informada.
La importancia de los INGEI es tal que permiten identificar y priorizar el diseño e implementación de acciones para aquellas actividades humanas que representan las fuentes más significativas de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y los ecosistemas naturales que los capturan dentro de un país.
País sumidero o carbono negativo
En Panamá se absorbe una mayor cantidad de GEI de los que se emiten a consecuencia de las actividades humanas. Es decir, las tierras forestales panameñas capturan más carbono que el total de las emisiones de gases.
“Esto nos define como un país sumidero o carbono negativo. Ser “carbono negativo” significa que se absorben más GEI de los que se emiten y Panamá, se encuentra entre los tres únicos países del mundo que cuentan con esta característica tan distintiva, junto con Bután y Surinam”.
Melani Acosta, analista de Mitigación al Cambio Climático del Ministerio de Ambiente de Panamá.
Un informe elaborado por la Dirección de Información Ambiental de MiAmbiente en 2019 indica que lo que hace que Panamá pueda gozar de tal distinción es que el 65.4% de su territorio está conformado por bosques y otras tierras boscosas, el 32.5% pertenece a otras tierras y 2.1% a cuerpos de aguas continentales.
Bosques
Los bosques juegan un papel clave en la mitigación del cambio climático ya que actúan como sumidero neto de los GEI causados por la deforestación, en particular desencadenados por la conversión de bosque natural a pastos. Además de estos resultados, el inventario nacional incluye los sectores de Energía, Procesos industriales y uso de productos (IPPU), Agricultura, Uso de la tierra, cambios de uso de la tierra y silvicultura (UTCUTS) y Residuos.
Restauración forestal
“Tenemos una enorme responsabilidad, y como tal Panamá se compromete a no bajar la guardia y a seguir trabajando para llevar a cabo la disminución progresiva del balance entre emisiones y absorciones”, explica la representante del Ministerio de Ambiente. Así se demuestra en el 2IBA donde se evidencia la disminución progresiva del balance entre emisiones y absorciones y donde la disminución es del 32.5% desde 1994, y de un 17.1% desde 2013.
“En ese sentido, vamos a llevar a cabo la restauración forestal de 50,000 hectáreas a nivel nacional, que contribuirán a la absorción de carbono de aproximadamente 2.6 millones de toneladas de CO2 eq al año 2050, tal y como se estableció en las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional en diciembre del 2020”, concluye Melani Acosta.