Cinco consejos para cuidar los alimentos en verano y evitar su pérdida

Ante el sostenido aumento de las temperaturas, es vital conocer las necesidades particulares de cada producto y organizarse en el hogar para, por una parte, no desperdiciarlos y, por otra, cuidar nuestra salud y no ingerir productos contaminados o descompuestos. Aquí te dejamos algunos consejos que ayudarán a mantener por más tiempo tus alimentos, evitando que terminen siendo basura, aportando a las emisiones de CO2 al medio ambiente.
- Lavar todos los productos antes de almacenarlos. Los alimentos (sobre todo frutas y verduras, pero también algunos envasados) suelen traer patógenos, bacterias o, incluso, productos químicos. Por eso, es vital lavarlos apropiadamente. Diversos expertos recomiendan la limpieza profunda de frutas y verduras con agua, vinagre y bicarbonato, por ejemplo.
- Mantén los alimentos calientes cuando serán consumidos prontamente. Un estudio de la Agencia Chilena para la Inocuidad y Calidad Alimentaria (Achipia) reveló que es necesario mantener una temperatura mínima de 60°C en todas las partes del alimento durante su mantenimiento en caliente, con el fin de garantizar su inocuidad, y cuestionan la eficacia del almacenamiento sin control de temperatura por un máximo de cuatro horas.
- Refrigera rápidamente. La temperatura ambiente provoca que las bacterias y microorganismos proliferen; por esto es clave poder refrigerar apenas sepamos que raciones no serán consumidas en el momento.
- Conoce las cualidades de cada alimento. No todos los alimentos necesitan los mismos cuidados: el tipo de almacenamiento (en refrigerador, en lugares frescos, en la oscuridad, etc.) varían según cada tipo de alimento, y lo mismo ocurre con sus procesos de refrigeración y congelación una vez cocidos. Es importante entender que cada alimento tiene necesidades distintas… así se podrán evitar tanto el desperdicio de ellos, como malestares o enfermedades graves por su ingesta.
- Planificar. La clave de la organización de alimentos y evitar su desperdicio es, por sobre todo, planificar. “Una vez que las familias entienden sus lógicas de consumo, pueden cocinar las raciones justas y comprar cada tres o cinco días los productos necesarios para cada comida. De este modo, no perderán dinero en alimentos que terminan en la basura, ni espacio de almacenamiento en sus hogares”, explica Elena López, cofundadora de Cheaf, la app que rescata comida en supermercados a la mitad de su precio original.