Asociaciones indígenas de Colchane lograron certificación orgánica de su producción de quinoa
Luego de 36 meses de arduo trabajo, las Asociaciones Indígenas Juira Marca de Colchane y Suma Juira de la localidad de Cariquima, lograron a través del proceso de autocertificación, incorporarse al registro del Sistema Nacional de Certificación Orgánica del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG). El registro les permite comercializar su producción bajo la denominación orgánica, biológica o ecológica.
Se trata de 52 pequeños productores de quínoa de la comuna de Colchane, en la región de Tarapacá, quienes luego de inscribirse voluntariamente en el Registro Nacional del SAG en mayo de 2018, y dar cumplimiento a los requisitos exigidos por la Ley 20.089 que crea el Sistema Nacional de Certificación de Productos Orgánicos Agrícolas, ahora están en condiciones de utilizar el sello orgánico nacional para etiquetar sus productos y comercializarlos bajo la denominación de productos orgánicos, biológicos o ecológicos.
En efecto, se trató de un trabajo comprometido y de largo aliento que incluyó una serie de visitas técnicas por parte del SAG, para verificar en terreno el cumplimiento de cada uno de los requisitos exigidos por la norma que considera -entre otros aspectos- que los mismos agricultores sean quienes realicen la autorregulación y certificación, cuidando que respeten las normas que este proceso demanda, además de contar con un manejo integrado de plagas, suelo, fertilización orgánica y registros de producción que sean trazables.
Cómo opera la agricultura orgánica
La agricultura orgánica, ecológica o biológica, es un sistema integral de producción silvo agropecuaria basado en prácticas de manejo ecológico, obteniendo y generando alimentos de calidad mediante técnicas que son amigables con el ambiente aprovechando para ello racionalmente los recursos naturales. De esta manera la agricultura orgánica mantiene y mejora la fertilidad de las tierras, evita la contaminación del suelo y las aguas al no utilizar abonos e insumos químicos, fomenta la agro biodiversidad y el equilibrio en los diferentes ecosistemas agrarios.
La Ley 20.089, que creó el Sistema Nacional de Certificación de Productos Orgánicos Agrícolas, establece las condiciones para la comercialización de productos bajo la denominación de orgánico o sus equivalentes. Una de estas condiciones para las organizaciones de pequeños productores orgánicos, biológico o ecológico es que debe estar debidamente Registrado en el Sistema Nacional de Certificación Orgánica.
Alfredo Fröhlich, Director Regional del SAG Tarapacá, manifestó su satisfacción por el logro alcanzado por los productores de ambas asociaciones Indígenas, afirmando que “gracias a este enorme esfuerzo que durante 3 años han realizado los integrantes de las Asociaciones Juira Marca y Suma Juira , ellos han logrado la autocertificación orgánica de una superficie superior a las 380 hectáreas, donde anualmente se producen cerca de 16 toneladas de quínoa de las variedades Apilahua de color rojo y Pandela blanca amarilla y rosada”, explicó la autoridad, señalando además que la acreditación “no termina aquí, ya que es el comienzo del proceso de autocertificación orgánica que se debe mantener en el tiempo, fortaleciendo la calidad de sus productos. Para ello deben seguir cumpliendo con lo establecido en la normativa vigente de certificación de productos orgánicos nacionales”.
