Ante la crisis climática el G20 llamó a defender el patrimonio mundial
La crisis climática amenaza también el delicado patrimonio del planeta y por eso, los ministros de Cultura del G20, el grupo de los principales veinte países industrializados y emergentes del mundo, abogaron el jueves por defenderlo desde una de sus joyas, el Coliseo romano.
Patrimonio de la Humanidad
“Proteger el patrimonio de la humanidad equivale a proteger la humanidad misma, la historia, el arte, la belleza. Por eso, cuando un museo por ejemplo es amenazado, todos nos sentimos heridos, pues formamos parte de la misma familia humana”, declaró el ministro anfitrión, Dario Franceschini, en la apertura.
Los ministros de la Cultura del G20 participaron en la apertura de este encuentro, bajo la presidencia de turno italiano, en un marco incomparable: el centro del milenario Coliseo, bajo la tenue luz del atardecer romano.
Franceschini, que recibió uno a uno a sus colegas a las puertas del Anfiteatro Flavio, donde sonaron algunas de las arias de ópera más famosas, aseguró que el sector se encuentra en un “momento crucial” tras la pandemia.
La razón, que la estampa de las ciudades vacías y confinadas en todo el mundo durante meses ha hecho comprender a sus gentes el valor de la cultura y de la socialización. Por eso, debe ser clave en las políticas que se pongan en marcha para la recuperación.
“La cultura será la herramienta para un crecimiento sostenible de nuestras sociedades, será la memoria del pasado, pero la brújula que nos indicará la ruta para el futuro”, apostó.
La gran amenaza de la crisis climática
El primer ministro italiano, Mario Draghi, apuntó que la economía será “crucial” para reanudar la vida. Basta pensar que el turismo en Italia supone el 13 % del producto interno bruto y da trabajo directa e indirectamente a 3,5 millones de personas.
Por eso, es preciso comprometerse a proteger este tesoro que “reclama también una mayor sostenibilidad medioambiental”.
En Italia “más de diez sitios Patrimonio de la Humanidad están en peligro por el aumento del nivel del mar” y la amenaza de las inundaciones pone en riesgo entre el 15 y el 20 % de los bienes culturales del país, el segundo con más sitios inscritos en la Unesco.
“Debemos actuar inmediatamente porque las generaciones del mañana puedan disfrutar de los tesoros que admiramos en la actualidad”, comentó, antes de pedir “compromiso y visión” para salvarlos.
Por su parte la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, subrayó que la cultura y el arte atesoran un “poder transformador” en nuestras sociedades y por eso deben tener “el rol que merecen” también con “inversiones públicas y privadas”.
Una cumbre de dos días
En la primera jornada del jueves el tema central fue la protección del patrimonio cultural de los saqueos y el tráfico ilegal de los tesoros del mundo, para lo que es esencial la colaboración internacional.
Por eso entre los asistentes estuvo el director de la Oficina de Naciones Unidas contra la droga y el crimen, Ghada Waly; el secretario general de la Organización Mundial de las Aduanas, Kunio Mikuriya, y el secretario general de la Interpol, Jürgen Stock.
Otro de los temas abordados fue la contribución de la cultura a la lucha contra el cambio climático, pues la presidencia italiana cree que la creatividad o el conocimiento de los pueblos indígenas pueden ofrecer alternativas para paliar la emergencia.
Entre los ponentes estuvo el ministro de Cultura y Deporte de España, Miquel Iceta, y el secretario de la Unión por el Mediterráneo, Nasser Kamel.
Otro de los temas abordados fue la transición digital en el sector de la cultura, donde se hizo hincapié en su importancia como motor para el crecimiento y la recuperación una vez pase la pandemia de coronavirus.